Se considera como “países mediterráneos” a aquellos a los que sus costas están bañadas por el Mar Mediterráneo.
El Mar Mediterráneo es un mar interior, que corre en los continentes asiático, africano y europeo y que se une al océano Altlántico en el extremo de occidente, a través del Estrecho de Gibraltar. En la antigua Roma, el Mar Mediterráneo era también conocido como Mare Nostrum y tuvo una importancia fundamental en la salida de los barcos que trasladaban mercancías.
En la actualidad, también posee una gran importancia como salida al mar de las antiguas repúblicas socialistas soviéticas y para el acceso de las naciones de Europa y América al petróleo de Libia.
La región del Mediterráneo está dividida por una barrera subterránea que avanza desde Túnez a Sicilia, separándolas en dos grandes cuencas: la oriental y la occidental. También existe otra barrera similar entre España y Marruecos, a la salida del Mediterráneo y que tienen 300 metros de profundidad. Esta pequeña barrera limita la circulación por el estrecho de Gibraltar y reduce el nivel de los mares. Las diferencias de las mareas, junto al nivel del mar Mediterráneo, hacen que posea un nivel de evaporación mucho más alto que otros mares, lo que vuelve sus aguas más salinas que el océano Atlántico, por ejemplo.
Los países del Mediterráneo son muy visitados por los turistas, ya que cuentan con playas espléndidas y vistosas, además de que posee un clima muy particular. Sus ciudades están preparadas para recibir una gran afluencia de turistas de todas partes del mundo y el turismo es una de las actividades principales en las que se destacan estos países.
Se considera como países mediterráneos a los que están bañados por el Mar homónimo. Estos países son:
En Europa:
- España
- Francia
- Italia
- Croacia
- Albania
- Grecia
- Turquía (en su parte norte)
En África:
- Egipto
- Libia
- Túnez
- Argelia
- Marruecos